sábado, 14 de mayo de 2011

Liberalismo sexual


De vuelta al maestro Michel Houellebecq y a su magnífico libro “Ampliación del campo de batalla”, extracto este párrafo en el cual el autor, con la precisión de una autopsia, describe el campo de batalla de la sociedad actual, la sociedad neoliberal, con sus perdedores en el ámbito económico y sexual. La ampliación del campo de batalla a todas las edades de la vida, a todas las clases sociales… ¡Tremendo!
Definitivamente, me decía, no hay duda de que en nuestra sociedad el sexo representa un segundo sistema de diferenciación, con completa independencia del dinero; y se comporta como un sistema de diferenciación tan implacable, al menos, como éste. Por otra parte, los efectos de ambos sistemas son estrictamente equivalentes. Igual que el liberalismo económico desenfrenado, y por motivos análogos, el liberalismo sexual produce fenómenos de empobrecimiento absoluto. Algunos hacen el amor todos los días; otros cinco o seis veces en su vida, o nunca. Algunos hacen el amor con docenas de mujeres; otros con ninguna. Es lo que se llama la "ley del mercado". En un sistema económico que prohíbe el despido libre, cada cual consigue, más o menos, encontrar su hueco. En un sistema sexual que prohíbe el adulterio, cada cual se las arregla, más o menos, para encontrar su compañero de cama. En un sistema económico perfectamente liberal, algunos acumulan considerables fortunas; otros se hunden en el paro y la miseria. En un sistema sexual perfectamente liberal, algunos tienen una vida erótica variada y excitante; otros se ven reducidos a la masturbación y a la soledad. El liberalismo económico es la ampliación del campo de batalla, su extensión a todas las edades de la vida y a todas las clases de la sociedad. A nivel económico, Raphaël Tisserand está en el campo de los vencedores; a nivel sexual, en el de los vencidos. Algunos ganan en ambos tableros; otros pierden en los dos. Las empresas se pelean por algunos jóvenes diplomados; las mujeres se pelean por algunos jóvenes; los hombres se pelean por algunas jóvenes; hay mucha confusión, mucha agitación.

2 comentarios:

  1. ¡¡¡Tremendo y tremebundo!!!

    ResponderEliminar
  2. jajaaaaa. pues sí, sí que lo es y quizá tmb taciturno, por añadir algo más con T.
    Parece un buen simil para retratar -ya en la parodia, no queda otra- lo de que unos sean los auténticos machos ibéricos y amantis religiisoa y los otros no se coman un colín, todo esto en realidad es por la imagen mal importada que la gente intenta copiar del BMVMiU 'business man-vencedor-made in USA'. Pero sí, me parece una buena mamera de desmitificar.. sí,señor!!! sobre todo lo de que el vencedor lleva en otras parecla la frustración meida dentro. y no me extraña: sentirse frustrado son precisamente muros que levantamos, poco sanos, que desfavorecen nuestro propio estado de salud incluso el de nuestra vida social. Bueno, para quien quiera cumplir ciertos mecanismos, presiones, expectivas, en usca de su éxito -yo soy 0 ambiciosa creo que no entro. bss

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...