miércoles, 4 de julio de 2012

Penitentia Agite


“Oh Jehovah, no me reprendas en tu furor, ni me castigues en tu ira.
Porque tus flechas han penetrado en mí, y sobre mí ha descendido tu mano.
No hay parte sana en mi cuerpo a causa de tu ira; no hay paz en mis huesos a causa de mi pecado.
Porque mis iniquidades han sobrepasado mi cabeza; como carga pesada me agobian.
Hieden y supuran mis heridas a causa de mi locura.”
(Salmo de David. Antiguo Testamento)
No tenía pensado redactar ninguna entrada sobre la victoria de la Selección Española de fútbol durante la pasada Eurocopa. Y eso que el histórico acontecimiento -deportivo, bien es cierto, pero no por ello menos histórico- bien merecía que le dedicara unas líneas. Porque ese triunfo ha supuesto el que, por primera vez, una selección nacional consiga ganar tres títulos mayores de forma consecutiva. Un logro que ha consagrado a una generación irrepetible de futbolistas que han demostrado algo que se dice muchas veces pero pocas se cumple, aquello de que el talento colectivo es superior a la suma de sus componentes. Y encima ganando de una forma sumamente bella, a la par que efectiva, erradicando de un plumazo ese aforismo tan español que reza “jugamos como nunca y perdimos como siempre”. No es casual que prestigiosos medios de comunicación internacionales –con L’Equipe, BBC, Wall Street Journal y New York Post a la cabeza- hayan sentenciado que “la Roja” es el mejor conjunto deportivo de la historia. 

Pues bien, decidí no decir ni … Y lo hice preso de un prejuicio absurdo, de una sensación extraña y malrollera próxima a la angustia, de un irracional complejo de culpabilidad (¡como sentir alegría con la que está cayendo en este país!) y también por un respeto mal entendido ante los graves acontecimientos que han tenido lugar en mi tierra durante los últimos días. ¡Pero ya está bien! Me libro de ataduras: Lo reconozco, vi el partido. Y lo que es peor, ¡me alegré de que España ganara! Lo pasé bien… ¡que coño bien! ¡¡¡de putísima madre!!! ¿Me convierte eso en un ser humano inferior? ¿Sí? Me lo temía ¿Y qué puedo hacer para redimirme? ¿Nada? También me lo temía… Pues tan sólo me queda expiar mis pecados a lo Salvatore: “penitenciágite, penitenciágite…”.

Pero, ¿a que viene esto ahora? ¿Que me ha empujado a escribir esta entrada, extemporánea a todas luces? Pues la brillantísima aportación de un amigo en una conocida red social. Una reflexión con la que no podría estar más de acuerdo. Procedo a transcribirla:
“…una pregunta retumba culpable mi acetilcolina a la vez que flagela mi pasado comportamiento...¿cabe la posibilidad, aunque sea mínima, que viendo el partido del pasado domingo uno no sea, al menos en grado irreversible, un cretino jilipollas que no piensa por si mismo o un proyecto de pirómano andante...?¿te alejaba más de la cretinidad estar en un concierto? ¿o durmiendo?...”
…y añado yo ¿o en una ponencia sobre las visiones de la violencia en el cine contemporáneo? ...¿o en una charla coloquio sobre el funcionamiento de los micro-créditos en Mali? ...o simplemente de cañas, que ya sabemos que después de la quinta o la sexta birra uno acaba divagando, sesudamente, sobre filosofía Marcusiana, recitando las “Bucólicas” de Virgilio y discutiendo sobre los errores de apreciación astronómica en la obra de Parménides de Elea.

En fin, lo dicho, no creo que haga falta añadir mucho más. ¡O bueno sí! Que el no disfrutar de un partido de fútbol -o esconderlo, que es casi peor-, no nos hace mejores personas y mucho menos nos convierte en sujetos más implicados con nuestra sociedad. ¡Que no sois mejores por ello! Que ni siquiera sois mejores que muchos de los que disfrutamos de estos placeres tan vulgares, por mucho que nos consideréis víctimas del borreguismo colectivo. Y que estoy harto de predicadores e iluminados que de todo opinan y de nada saben. Afectados de postal cuya máxima aportación a la colectividad empieza y termina colgando un enlace en Facebook. ¡¡¡Que no sois mejores que yo pringaos!!!

Eso sí, penitenciágite


A/a Kaixa (Sosé)... con amor.

6 comentarios:

  1. Muy buena reflexión. Y estas perdonado hijo mío je je je. Me sabe muy mal que se preste tanta atención, via tv y periódicos, a un evento deportivo, importante si, por encima de una catástrofe de tal magnitud. Siempre teniendo en el punto de mira a medios que tratan de quitarle importancia a una cosa y darsela a la otra o a politicastros verdaderos responsables de tal asunto. Los jugadores, pobrecitos, ellos no tienen la culpa de na, y quienes disfrutan de tal evento, pobrecitos tambien, tampoco. Por favor, espero no haber dado una sensación erronea. Solo que me hubieran gustado que en los periódicos locales aparecieran titulares tipo "Ni roja no hòsties, el País Valencià es crema pel foc", pejillero que es uno. Molt bona reflexió i molt encertada. Salut

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  2. Te juro por Dios que al leer esto, me he levantado de la silla y he aplaudido (si, es raro, pero si hay gilipichis que aplauden en el cine cuando acaba una peli, porque no lo voy a hacer yo en mis aposentos cuando me plazca, jaja). Magnifico, una manera impecable de hacer entender a los piscóticos, que no somos el diablo por haber disfrutado del partido y porque nos guste el deporte.
    A ver si por pasar un rato divertido, vamos a ser unos ciegos y unos borregos, venga yaaaaa!!
    Con tu permiso, voy a enlazar esta entrada.
    (Espero a mañana para tener tu autorización).
    Un abrazo!

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  3. Tens raó respecte a les propietats anestèsiques del futbol davant el desastre que estem patint, i en la dolenta utilització de les mateixes per part dels polítics que ens governen als quals, per que no reconèixer-lo, els ha vingut de collons l'èxit de "la Roja". Estic d'acord en lo que dius dels mitjans locals (també hauria d'haver estat així en els mitjans generalistes de tiratge nacional, crec). És més, al meu entendre, haguera estat tot un detall que "el listo de la barba" (Wyoming dixit) hagues dit que no anava al partit davant els lamentables esdeveniments de València i que haguera aparegut per ací donant la cara.
    És veritat, tens raó, però el post el vaig enfocar en altres qüestions. Sobretot el vaig escriure front al cúmul d'implicats de nou cuny (no tots ho són, però si la majoria dels quals jo conec) que s'han posat a despotricar contra aquells que la nit del diumenge va decidir passar el rato mirant la tele, i que, fins i tot, ens vam alegrar del triomf en la Eurocopa. Més que res perquè tots ells (i ací no excepcione a cap) estaven a casa tocant-se les boles sense fer una merda (en alguns casos inclus veient el mateix partit que vaig veure jo). El que tracte d'expressar, torpement, ho reconec, és que estic fart de compromesos "de boquilla" que són capaços de jutjar les actituds dels altres i no les pròpies. I sí, es cert, canvie la final de la Eurocopa per flora i fauna en bon estat. Canvie al puto Iniesta per una taxa d'atur raonable. Canvie tots els títols de la punyetera Roja per veure a Camps i a la resta de corruptes a la presó. Per desgràcia les coses no van així. Ja ens agradaria.

    Salut (i força al canut)crack...

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  4. El honor es mío Txarls. Puedes hacer lo que te plazca, ya lo sabes, no tienes que pedir permiso para nada...

    Un abrazote fiera...

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  5. Bueno , yo también vi el partido y evidentemente me alegré que ganara España. Pero creo que hay siempre un termino medio , vamos que no me siento identificado con ese sentir patriótico rancio que confunde el amor por un deporte con la manipulación mediática y política.
    Creo que es totalmente compatible disfrutar con pasión de cualquier evento popular y tener el suficiente sentido común para dar prioridades a nustras necesidades actuales. Eso no es demagogia simplemente sentido común , por mucho que halla oportunistas de ambos bandos , lo que me jode soberanamente es que intenten venderme la moto.

    SDALUDOS Y MUY BUENA ENTRADA.

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  6. "Creo que es totalmente compatible disfrutar con pasión de cualquier evento popular y tener el suficiente sentido común para dar prioridades a nuestras necesidades actuales" Eso es... o al menos así debería ser.

    Un saludo.

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