Los
cojones me voy a meter yo en este berenjenal...
Pero
ya que he captado vuestra atención aprovecho para introducir un par
de reflexiones que
me asaltaron, o más bien se introdujeron into
my enormous chola, tras
el partidito de fútbol de ayer noche. A ver chavalotes, como sé que
sois de los que se dejan llevar por ese placer menor, a todas luces
indigno para gentes de vasto intelecto como vosotros, ya
os
habréis
percatado
del asunto que nos ocupa: el de "la intención" futbolera. Temita
recurrente dentro del microcosmos
casposo del periodismo deportivo patrio
capaz de elevar
a
la sacrosanta “intención”
del mago, del playmaker
y hasta del tuercebotas de turno, al nivel de valor
supremo.
Pongamos por caso que en
un partido de la selección
Xavi
lanza un pase en profundidad a Soldado,
pero el pase sale por la banda porque el
fino mediocampista catalán
no ha visto que mi
paisano
rompía a
correr en la otra
dirección.
Pues bien, al
comentarista de turno le
faltará tiempo para alabar
“la intención” con
la que Xavi Hernández
ha
dado el pase.
Ni
se le ocurrirá plantearse que Xavi se
haya
podido
equivocar,
que
haya
golpeado
la pelota con la
uña o
que al tipo
se
le haya cruzado el cable y pegase un
balonazo contra el público. Da
lo mismo.
Ha
tenido intención y "la intención" en este mundillo es algo sumamente
positivo.
De
hecho es lo único que siempre es positivo (nuuunca negatiffo!!!). Lo
que
me inquieta
es que al Manolo
Lama o al Kiko
Narvaez
de
turno no se
le
haya pasado por la cabeza que eso de
la intención es una
milonga. Vamos, que "la intención", como el valor en la antigua mili,
se presupone. El tipo hace el pase con la intención de que llegue a
buen puerto, lógico,
como el
delantero chuta con la intención de marcar o
el
defensa se lanza al corte con la intención de deshacer la jugada de
ataque del oponente o
el portero se lanza al suelo con la intención de atajar la pelota.
La intención del
futbolista es algo que va
en el sueldo, como la intención del panadero en
hacer un pan o
la del fontanero en
arreglar
las cañerías. Pero si lo hacen mal pues no hay intención que
valga. Joder, no me veo yo con el piso inundado y exculpando al
jodido fontanero que vino a revisar las bajantes por su "intención" reparatoria, ¿capish?
En fin coleguis, que la cosa está bien malita.
Eso y que disfruten mucho del 11-S los amigos catalanes... y por supuesto también los amigos chilenos...
Eso y que disfruten mucho del 11-S los amigos catalanes... y por supuesto también los amigos chilenos...
Una lectura del 11S perrrrfecta,.... Jo també pense que Mas no tenia cap intenció de xutar a porta i ara que veu que la pilota a lo millor entra no sap cap on mirar.
ResponderEliminarLa segon reflexió també certera, " Guerracivilistas incapaces de salir de su trinchera" , per dues bandes afegiria jo.
Una salutació.
:)
Una altra p'a tu ... i gràcies per comentar crack!!!
ResponderEliminar