Mi primer acercamiento al universo Wallander, se lo
debo a la biblioteca pública de Almussafes. Me apetecía leer alguna historia
sencilla y de fácil enganche, por lo que me dirigí hacia la sección de novela
negra. Allí me topé con la portada de un libro que me llamó poderosamente la
atención. Mostraba el detalle de un cuadro de algún pintor prerrafaelita. La
novela se titulaba “El hombre sonriente” y su autor era un tal
Henning Mankell. La cuarta entrega de la serie del detective Kurt Wallander. Esa
que narra las desventuras de un atípico inspector de la policía de Ystad,
una pequeña localidad al sur de Suecia. Un escenario que,
en aquel momento, me parecía poco adecuado para el desarrollo de tramas
delictivas. Poco importó. Una vez terminado el libro volví a por más. Quería saber más sobre Wallander. Más bien necesitava Wallander en vena. Aún ahora, agotada la serie hace tiempo, a veces siento el mono.
Lo más interesante de la serie es como Mankell consigue
que nos encariñemos e incluso identifiquemos con un personaje complejo y a
veces desagradable, repleto de virtudes pero con demasiados defectos. Y es que,
a lo largo de las nueve novelas protagonizadas por Wallander, participamos de
sus anhelos y sufrimos por sus decepciones, también nos alegramos por sus éxitos
si bien, temiendo que las investigaciones nunca lleguen a buen puerto o que los
malos acaben ganando la partida. Y es que el detective es un personaje de carne
y hueso, demasiado humano incluso, haciendo gala de tal condición para meter la
pata hasta el fondo con asiduidad. Contra lo que pudiera parecer, esto enriquece
las tramas. Es más, a veces resulta más interesante la vida privada de Wallander
que la investigación criminal de turno. Cómo ocurre con la fluctuante relación
con su hija Lisa, que es directamente de love & pain en el caso de su
anciano padre, un pasito para adelante y dos para detrás dependiendo del momento. También mola la extraña amistad o compañerismo que guarda con Svedberg
y los sucesivos comisarios, algunos de los cuales veremos crecer con las
entregas. Nada que ver con la admiración confesa por su mentor, el detective Rydberg,
cuya sombra siempre es alargada. Por no hablar de ese amor casi platónico por
Baiba Lieppa, protagonista secundaria de una de las novelas más celebradas de
la serie. Como veréis son un montón de tramas y subtramas que se enredan a la
investigación principal novela a novela, pero que, a diferencia de aquellas, no
tienen un principio y un final. Aparecen y desaparecen como los ojos del Guadiana
a lo largo de estas casi 3500 páginas que glosan la vida y
obra de Kurt Wallander.
¿Qué más decir sobre Wallander? Pues que os leáis las novelas. Y que abordéis la serie siguiendo un criterio cronológico, como yo no hice. Porque cada libro incluye guiños a los anteriores y las investigaciones suelen tirar de elementos descubiertos años atrás. De todas formas, cada historia es independiente y, en cierto sentido, autoconclusiva. Siendo las más interesantes “La falsa pista” y sobre todo “La quinta mujer”. Curiosamente la primera que se publicó en España pese a ser la sexta de la serie.
El orden de las novelas es el siguiente:
1. “La pirámide” (1999). Compila cinco relatos cortos en los que se abordan pasajes de la vida de Kurt Wallander anteriores a las tramas desarrolladas en el resto de libros.
2. “Asesinos sin rostro” (1991)
3. “Los perros de Riga” (1992)
4. “La leona blanca” (1993)
5. “El hombre sonriente” (1994)
6. “La falsa pista” (1995)
7. “La quinta mujer” (1996)
8. “Pisando los talones” (1997)
9. “Cortafuegos” (1998)
Además, en el 2002 Henning Mankell publicó la novela “Antes de que hiele”, cuyo personaje principal es Linda Wallander, la hija del inspector.
Como anécdota final comentaros que todas las novelas han tenido su correspondiente adaptación en forma de telefilm. Cintas bastante irregulares que recogen las andanzas del detective Wallander a quien pone cara el actor Rolf Lassgaard. También existe una serie de televisión inspirada en la figura del detective. En la actualidad podemos verla en Localia TV y creo que también en algún canal del cable.
3. “Los perros de Riga” (1992)
4. “La leona blanca” (1993)
5. “El hombre sonriente” (1994)
6. “La falsa pista” (1995)
7. “La quinta mujer” (1996)
8. “Pisando los talones” (1997)
9. “Cortafuegos” (1998)
Además, en el 2002 Henning Mankell publicó la novela “Antes de que hiele”, cuyo personaje principal es Linda Wallander, la hija del inspector.
Como anécdota final comentaros que todas las novelas han tenido su correspondiente adaptación en forma de telefilm. Cintas bastante irregulares que recogen las andanzas del detective Wallander a quien pone cara el actor Rolf Lassgaard. También existe una serie de televisión inspirada en la figura del detective. En la actualidad podemos verla en Localia TV y creo que también en algún canal del cable.
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